Un juez federal concedió una orden judicial preliminar que pone en pausa el Proyecto de Ley 4156 de la Cámara de Representantes, una controvertida ley que permite a las autoridades de Oklahoma arrestar a personas basándose en su estatus migratorio. La nueva ley, que debía entrar en vigor el 1 de julio, ha encontrado la oposición de muchas organizaciones diferentes, incluida la Asociación de Jefes de Policía de Oklahoma y los líderes de las agencias de aplicación de la ley de Metro, y legisladores estatales. El 15 de mayo, el Departamento de Justicia de Estados Unidos envió una carta al gobernador Kevin Stitt y al fiscal general Gentner Drummond, amenazando con emprender acciones legales si se aplicaba la HB 4156. Drummond envió una carta en respuesta, reafirmando la intención del estado de hacer cumplir la ley de inmigración. Como resultado, el DOJ presentó una demanda contra el estado el 21 de mayo.