Letitia James, la fiscal general de Nueva York, y otros diecinueve fiscales generales presentaron un escrito a favor del programa federal Keeping Families Together el 25 de octubre. Permite a las esposas e hijastros ilegales de ciertos ciudadanos estadounidenses solicitar la residencia permanente sin tener que salir la nación. 16 estados presentaron una demanda contra el DHS y funcionarios federales el 23 de agosto, alegando que Keeping Families Together promueve la inmigración ilegal y elude la autoridad del Congreso. La demanda sostuvo que el DHS no solicitó adecuadamente la opinión pública antes de implementar el programa y que la ley federal prohíbe brindar beneficios a inmigrantes no autorizados. Según los demandantes, cuando aumentan la delincuencia y los problemas sociales, también aumentan los gastos de aplicación de la ley. Mantener a las familias unidas es un beneficio público que fortalece a las comunidades al poner en primer lugar el bienestar de los niños, quienes no deben ser separados de sus padres, según el escrito amicus curiae de los fiscales generales de otros estados. Además, permite trabajar a los no ciudadanos, lo que impulsa la economía, amplía la base impositiva y alivia la escasez de mano de obra. Además, señalaron que el gobierno federal tiene una larga historia de minimizar la separación familiar a través de programas de libertad condicional. Está previsto que la demanda sea vista en el Distrito Este de Texas el 5 de noviembre.